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Excursión a Lucena (Córdoba). 7: Almuerzo en «El Palomar», Encinas Reales

25 de abril de 2024

El pasado 16 de marzo fuimos de excusión de un día a Lucena (Córdoba). El viaje fue organizado por Viajes Alcaraz.

En este mismo viaje, ya habíamos comentado el desayuno en «El Palomar», puede verse aquí: Excursión a Lucena (Córdoba). 1: Desayuno en «El Palomar», Encinas Reales (Córdoba) | De tapas y otras cosas por Fuengirola (ares.fm)

Tras terminar nuestra visita a la ciudad de Lucena, volvimos al autobús y nos dirigimos hacia Encinas Reales, al restaurante «El Palomar».

De vuelta al restaurante «El Palomar»
En el jardín del restaurante estaba esta preciosa rosa.
Al ir hacia nuestro comedor, pasamos por el bar, en el que, tras terminar la comida muchos tomamos un café.

Tal vez sea interesante explicar la razón de que las caras estén pixeladas. Al hacer una foto de estudio, podemos elegir qué es lo que queremos fotografía y qué no. Podemos elegir la iluminación o conseguirla artificialmente, pero en los viajes, todo se ve muy deprisa, no disponemos de tiempo, tenemos que sacar la foto y luego arreglárnoslas. Eso es lo que pasa en esta foto. Pasé por el bar, y quise mencionarlo, pero, obviamente, no podía esperar a que se fueran de la barra, así que la saqué y después me ha tocado quitar las caras.

Tras sentarnos, lo primero que nos trajeron fue una ensalada con atún y huevo.

Ensalada de verduras con huevo.

En la mesa había un vino tinto. Ni que decir tiene que no era nada más que un sencillo vino para acompañar la comida. Pero, dentro de su sencillez, no estaba mal, se dejaba beber.

También había agua y gaseosa, como es habitual en este tipo de menús.

Agua mineral y «La Casera». Me gusta que el agua se llame Botijo. Me recuerda viejos tiempos.
Nuestra mesa.
Primer plato: alubias blancas con patatas y morcilla. (Potaje de habichuelas)

Al sacarme el primer plato, vi perfectamente de lo que se trataba, pero quise saber el nombre que le había dado el restaurante. El camarero, amabilísimo, disculpó mi ignorancia y me dijo que ellos lo llamaban potaje de habichuelas.

Primer plano de la morcilla.

Al oír al camarero decirme cómo se llamaba el plato no pude dejar de recordar la canción de Antonio Molina titulada «Cocinero, cocinero», en la que habla del «arroz con habichuelas».

De segundo podíamos elegir entre un filete de lomo a la plancha con salsa, y una merluza.

De postre había varias cosas, pero todos los de mi alrededor escogieron natillas.

Natillas con la típica galleta maría en la superficie.

Al terminar de comer, fuimos hacia la entrada. Recuerden que había una fuente. La fuente era la misma, pero la iluminación no, lo que me permitió hacer algunas fotos bastante distintas de las que había hecho por la mañana.

Es posible que esta mañana se me olvidase decir que para subir al restaurante hay rampa, muy importante para los que tienen/tenemos algún problema a la hora de subir escalones:

Rampa para evitar las escaleras.
El corro e la fuente desde otro ángulo y con otra iluminación.
La fuente con sus chorros de leones y el niño en el medio.

Tras una breve pausa, por si alguien quería tomar café en el bar, subimos al autobús. Pocos minutos después veíamos una colina y la gigantesca silla de la que hablamos en Excursión a Lucena (Córdoba). 2: La que fue la silla más grande del mundo en Lucena (Córdoba) | De tapas y otras cosas por Fuengirola (ares.fm)

A la izquierda, la sierra de Aras, en cuya cumbre está el santuario de la Virgen de Araceli (patrona de Córdoba) y en el centro, hacia arriba, podemos ver la silueta de la silla gigante.

Nos dirigíamos hacia el santuario de Nuestra Señora de Araceli, en la cumbre de la colina.

De ese santuario irá nuestra siguiente entrada.


Notas


Nota sobre fotos

Las fotos que se han utilizado, han sido realizadas por Félix Ares y Álvaro Ares y las licenciamos como Creative Commons. Attribution 4.0. International CC by 4.0. Puede usarlas, pero deben dar crédito a los autores y que se han sacado de la página https://felix.ares.fm

Creative Commons License

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