Bar EL REMO

Actualización 11 se septiembre de 2011: Ha cambiado de dueños y de nombre. Ahora es una pizzeria que se llama Myrryland. En su momento exploraremos y os lo contaremos.

Destacamos: estupendas tapas variadas a 1 €

Es una bonita cafetería, con el exterior pintado de color fucsia. Está en la calle Ramón y Cajal (continuación de los Boliches) esquina a la calle Cuarteles, en una placita enfrente de la oficina de Correos de los Boliches y enfrente de Mercadona.

Cafetería bonita decorada, el exterior pintado en rosa fucsia.

Aquí está la foto de Google Street:

Entre las excelentes tapas destacamos: las croquetas de cocido y unas estupendas croquetas de setas, ensalada de tomates, patatas ali oli, ensalada rusa, berenjenas rebozadas, albóndigas, huevos rellenos, muslos de pollo, alitas de pollo, pimiento asado… Hay muchas.

La bebida cuesta 1,20 €.

El camarero que nos sirvió es muy simpático y por supuesto habla varios idiomas.

Aspecto de la terraza. Obsérvese que en la pizarra se dice que los sábados hay paella

Hay cafetería interior, y terraza descubierta fuera. Casi siempre se ven muchos extranjeros. En este barrio viven muchos finlandeses que por lo que observamos les gusta mucho tapear.

En la pizarra pone: Todas las tapas a 1 €
Carta de tapas
Ejemplo de bebidas y tapa
Pizarra

En general en Fuengirola, lo que más hay son ingleses, por eso, en todos los establecimientos hablan como mínimo inglés, incluidos los «Todo a cien», que suelen tener una empleada española, pero que habla varios idiomas, por lo que Fuengirola, es uno de los lugares más acogedores que conozco con las personas que viven o la visitan.

La mayoría de los letreros están en inglés bien sea de ropa, comida o autobuses, con lo cual nadie se siente extranjero, y he de destacar, que la mayoría de los taxistas, saben defenderse en inglés, y añadiría, que son muy simpáticos; si tuviera que puntuarles les daría un diez.

Tal como hemos dicho, el bar está enfrente de Mercadona, que dicho sea de paso, sus empleadas hablan también inglés, son solícitas, y nunca les ves mala cara, ¡será que lo da la tierra!, y como bien dice el eslogan de esta ciudad de la que estoy enamorada, es un sol de ciudad.