De tapas y otras cosas por Fuengirola

23 de abril de 2022

El día 23 de abril fuimos de excursión al pueblo de Piñar en Granada. La cueva de las ventanas están la parte alta del pueblo, pero no se accede a ella directamente, sino que hay un centro de recepción donde se compran las entradas y donde se coge un «tren» turístico que te lleva hasta las cuevas. Allí mismo hay un interesante museo con piezas del neolítico y de la edad de hierro.

Llegamos al pueblo de Piñar cuando llovía. Desde el autobús intente sacar el castillo, que estaba encima de nosotros, pero mi teléfono se empeñó en fotografiar las gotas de lluvia en vez de la fortaleza. ¡Manías de los teléfonos!

La Cueva de las Ventanas está cerca del castillo. Para llegar a ella hay que hacer un buen tramo a pie cuesta arriba. Es difícil para personas como yo que ya tenemos algunos años y algunos achaques, pero, por suerte, hay un «tren chuchú» que te sube hasta la cueva.

Así que lo primero que hay que hacer es ir al «Centro de Interpretación de la Cueva de las Ventanas», para adquirir las entradas y esperar al «tren».

Allí, en el Centro de Interpretación, hay un pequeño museo con las piezas del neolítico y de la edad del hierro que han encontrado en las Cueva. Es un museo un poco naif. Pero eso mismo le da un enorme encanto. Todo rezuma un aire de aficionado que me fascina.

Nada más entrar nos encontramos un mural hecho de manos y con algún mensaje de esos buenistas que ahora no recuerdo:

Pared del Centro de Interpretación de la Cueva de las Ventanas.

También vemos dos carteles donde se anuncian el pueblo, Piñar, y la Cueva de las Ventanas:

En el Centro de Interpretación hay un pequeño museo con piezas auténticas y algunas reproducciones que son bastante interesantes.

Por ejemplo, hay reproducciones de dos cráneos uno de nuestra especie (*Homo Sapiens*) y otro de un neandertal. Izquierda: Sapiens, derecha: Neandertal.

Hay varias vitrinas con piezas del neolítico, ya saben: piedra nueva, donde nuestros antepasados hacían virgerías con la piedra y con el hueso.

También hay muestras de las excelentes cerámicas del neolítico:

Y también hay herramientas de la Edad del Hierro. Como el hierro se oxida su restos siempre están roñosos.

Otras herramientas. La dl borde superior izquierdo es metálica.

Desde el museo se puede ver una de las casas con los tejados típicos del pueblo.

Les recuerdo que esta excursión, la realizamos gracias a los esfuerzos de Elisa. Sus carteles, anunciando excursiones, suelen verse en distintos establecimientos de Los Boliches (Fuengirola).

Nota sobre fotos

Las fotos que se han utilizado, han sido realizadas por Félix Ares y Álvaro Ares y las licenciamos como Creative Commons . Attribution 4.0. International CC by 4.0. Puede usarlas pero deben dar crédito a los autores y que se han sacado de la página https://felix.ares.fm

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NOTA: ya saben ustedes que el Spam está a la orden del día. Si pusiera me dirección de correo electrónico en forma visible, mi buzón se llenaría de basura. Si quieren ponerse en contacto conmigo, pueden hacerlo en esta dirección, que pienso está suficientemente difícil para los robots.

23 de abril de 2022

El día 23 de abril fuimos de excursión al pueblo de Piñar en Granada. Como el viaje desde Fuengirola es bastante largo, paramos a desayunar en Riofrío, una pedanía del municipio de Loja. Desayunamos bien, pero nos quedamos con ganas de ver la piscifactoría de truchas y de esturiones que hay allí. Sí, de esturiones, de donde obtienen un caviar clase beluga que se exporta a muchos lugares.

En nuestro camino desde Fuengirola a Pinar de Granada hay bastantes horas de viaje, así que paramos a desayuna en la pedanía de Riofrío del municipio de Loja. Una de las cosas más interesantes de esa pedanía es su piscifactoría, donde crían truchas y esturiones. Lo de las truchas es normal en España, pero lo de los esturiones no.

Los esturiones, de los que procede el caviar —y ahora recuerdo el chiste, de los esturiones, no de los centuriones—, son peces de crecimiento muy lento. De hecho, hasta que no tienen dieciocho años no se pueden obtener las huevas de las hembras. Así que hay que alimentar y cuidar durante dieciocho años a un pez, para que nos proporciones unos gramos de huevas. Por eso es tan caro. En la piscifactoría de Riofrío se crían tres especies de esturiones, entre ellas la conocida «beluga» que proporciona el famoso caviar de su nombre.

Una vez que el autobús paró, una de las cosas que me llamaron la atención, fue el anuncio del Caviar Riofrío, a lo lejos.

Nosotros desayunamos en la Venta Riofrío. Observen la foto de abajo, en el letrero que anuncia el lugar, hay dos truchas.

A la entrada hay una señal que nos informa de que se trata tanto de una venta como de un complejo hostelero.

Complejo hostelero, venta de Riofrío (Granada)

Lo primero que me llamó la atención nada más entrar fue que sobre la barra del bar había truchas al lado de las cuales se explicaban distintas formas de cocinarlas:

Encima de la barra hay truchas con diversas formas de cocinarlas. A la izquierda se ve «a la cazuela».

Veámoslo en detalle:

Las caras las he tapado a propósito. Para evitar indiscreciones.

Entramos en el comedor:

El comedor y la disposición de las mesas para el desayuno.

Estamos ante el típico desayuno andaluz: Aceite virgen de oliva, tomate picado, manteca blanca y manteca roja (zurrapa), mermelada y mantequilla.

Detalle de tomate triturado, arriba a la izquierda; zurrapas roja y blanca, arriba a la derecha; y mantequilla y mermeladas abajo.

Un elemento imprescindible en los desayunos andaluces es el aceite de oliva; pero no un aceite cualquiera, un aceite virgen y en este caso de oliva Hojiblanca.

Aceite de oliva virgen extra con oliva hojiblanca.

Lo que no puede faltar en ningún desayuno andaluz son las tostadas. En este caso un bollo (¿mollete? Reconozco mi ignorancia, no sé a qué llaman mollete) tostado por las dos caras.