Nos tienen que perdonar por el título, pero es es el que se nos ha ocurrido. Hace ya muchos años, allá por la década de los 70 del siglo pasado que un «investigador» de ovnis francés decía que a veces los ovnis se disfrazan de nubes para despistar a los observadores humanos y que por eso teníamos esa nubes en forma de platillo. La borrosa nube en su interior escondía un platillo volante con seres inteligentes procedentes de otros mundos.
Aunque la creencia es esas supuestas visitas extraterrestres ha caído mucho en los últimos años, aun hay muchas personas que siguen creyéndose el cuento del «investigador» francés. Aquí tienen un ejemplo actual. Ya hemos dicho aquí.
El caso es que la semana pasada al mirar al oeste vimos estas preciosas nubes orográficas de forma lenticular. Las nubes lenticulares tienen forma de lente, que dicho sea de paso es el origen de la palabra lenteja, por su indudable forma lenticular. Lenteja viene a ser algo así como «lentilla». En francés es evidente pues lenteja se dice «lentille» y las «lentillas» se dicen «lentilles». ¡Curioso! «No te olvides de ponerte las «lentejas» pues si no no ves nada».
Una foto de las nubes orográficas la hemos sacado del artículo de la Wikipedia y es esta [no, no nos regañe; según la última ortografía este esta no se acentúa ]:
Pero volvamos nuestra mirada a Fuengirola, hacia las montañas del oeste:
Habíamos ido muchas veces al Centro Comercial Miramar, donde están los cines Miramar y Eroski, y al llegar, a la derecha habíamos visto un quiosco e incluso nos habíamos acercado a echar una mirada, pero el nombre no nos atraía demasiado pues nos hacía pensar en que sería la típica comida de crios: chuherías, helados y hamburguesas y que, en consecuencia, estarían gritando permanentemente. La verdad resultó ser muy distinta.
Al lado mismo del quiosco hay una pista de Skate (que podríamos traducir por patines), efectivamente llena de niños, pero lo que nos sorprendió es que no había casi patines, mayoritariamente lo que había eran bicicletas.
Hace unos días participamos en un concurso de la radio, de esos que se responde a una pregunta por teléfono, y nos tocaron 15€ para gastarnos en el Burger La Casa del Skate. Así que decidimos ir y probarlo. Fuimos un sábado al mediodía, por lo que en las pistas había bastantes chavales.
Al entrar nos llevamos una grata sorpresa al comprobar que el ambiente era muy agradable y tenían unas mesas en el exterior sobre el césped también con aspecto apacible. Tomamos unas cuantas cosas y durante todo el tiempo el entorno fue tranquilo. De vez en cuando algún chico iba y pedía una bebida, patatas u otras chucherías pero rápidamente se iba a las pistas por lo que no molestaban lo más mínimo, al menos a nosotros.
Los precios están puestos en lo alto el mostrador, al estilo de los Burger.
Como el letrero no se lee muy bien, les doy algunos precios:
Burger. Normal 2,50€; completa 3,50. Bocadillos de gran variedad de cosas 3€
talle de precios
Pero si nos fijamos en los anuncios escritos a mano debajo del anuncio grande, vemos que no es la típica hamburguesería pues también hay otro tipo de comida:
Aunque el letrero dice que los fines de semana hay fideuás y arroces, la verdad es un poco más restrictiva: los sábados hay fideuás y los domingos arroces.
Como era de esperar también hay una zona de chuches
Dado que ra sábado nos decidimos por fideúa y lomo con patatas.
Como muy saben ustedes la fideuá es parecida a la paella pero donde se ha sustituido el arroz por fideos. En la comunidad valenciana es muy popular, casi tanto como la paella, pero en el resto de España bastante menos.
La comida resultó bastante agradable y aunque con las bebidas nos pasamos de los 15€ no fue demasiado. Todo, incluyendo dos vasos de vino de Rioja –que en Fuengirola es bastante más caro que la cerveza, no sabemos bien por qué– fueron 20 €.
Exterior
Otro letrero
Entorno
Tal como ya hemos dicho está al lado del Centro Comercial Miramar, al lado del río. Al salir, en la carretera vimos un pajarito, cuyo nombre no conocemos.
El puente que cruza el río estaba lleno de banderolas:
En definitivas cuentas nos resultó bastante agradable.