Bar Restaurante Las Tinajas, Valdepeñas, Ciudad Real

13 de septiembre de 2021

Bar Restaurante con menú del día por 10 € incluso los sábados y domingos. Cocina popular, bastante buena y atención amable.

Menú del día

Me gustan los menús del día por varios motivos. El primero es que como se trata de los platos que van a servir ese día, ya están casi preparados y el servicio suele ser rápido. El segundo es el precio, no solo es que normalmente es más barato, por muchas razones que se apartan del alcance de esta entrada, sobre todo es que sé lo que voy a pagar. Cuando como a la carta nunca sé cuánto va a ser la factura final. He comido menús del día en restaurantes de varias estrellas Michelin por 250 €. Pero he preferido pedir el menú, que elegir de la carta. Seguro que eligiendo de la misma hubiera encontrado algo más barato, pero ese no era mi planteamiento. Lo que yo quería es saber lo que tengo que pagar. Y eso es lo que me dan los menús del día o menús de degustación.

Encontrar un menú del día en la carretera de Andalucía es bastante complicado, al menos para mí. Y encontrarlo los fines de semana es casi un milagro.

Por eso, cuando descubrí el restaurante Las Tinajas, un domingo, quedé gratamente sorprendido. Además, el precio era económico y también tenían menú para niño. ¡Excelente!

Ubicación

Al llegar a Valdepeñas, nos encontramos con una rotonda que tiene un monumento dedicado a la letra Ñ. Soy de los que creen que el sonido eñe se puede representar de muchas formas, como por ejemplo con gn como en francés, pero reconozco que me gusta la ñ. El monumento fue inaugurado en 2018 para conmemorar los 40 años de democracia en Valdepeñas. Se puede consultar un artículo periodístico de la época aquí.

Monumento a la Ñ conmemorando los 40 años de la Constitución en España. Valdepeñas.

Nada más entrar en Valdepeñas nos encontramos con una gran avenida flanqueada por tinajas. Se trata de la llamada Avenida del vino, aunque popularmente se la conoce como Avenida de las tinajas.

Avenida del vino o de las tinajas. Valdepeñas.

Las enormes tinajas le dan un aspecto impresionante a esta avenida. Pero quizá, para apreciarlo mejor, sea interesante acercarnos y en un primer plano ver el tamaño de los recipientes.

Tinaja en la Avenida del vino en Valdepeñas.

He de reconocer que su tamaño me sorprendió. Para llenarla de vino, sin duda que se necesitan muchas uvas. De estas tinajas surgió el afamado vino de Valdepeñas. Quizá el fermentar el vino y guardarlo en tinajas de barro (o en los pellejos contra los que luchó Don Quijote) no sea lo que más gusta hoy en día, pues nos hemos decantado por los caldos que se crían en barricas de madera, principalmente roble. Pero, sin duda, estas tinajas nos sumergen en la historia.

En el número 69 de esta avenida está el restaurante las Tinajas. Es fácil verlo, pues es el único edificio que tiene una tinaja con un tenedor, una cuchar y un cuchillo en un mástil en su tejado.

El interior

El interior es sencillo, pero funcional.

Restaurante Las Tinajas por dentro. Valdepeñas.

En su decoración figuran escenas de Valdepeñas, y cómo era de esperar, las tinajas están presentes en muchos de sus cuadros.

Decoración de tinajas en el restaurante Las Tinajas de Valdepeñas.

El menú

Para mi gusto se trata de un menú que me satisface. Tengo que aclarar que hemos estado varias veces, y no siempre es menú es el mismo. Pongo este como ejemplo, pero cada día es diferente.

San jacobos.
Plato infantil

Para beber no podía faltar el vino de Valdepeñas.

Vino de Valdepeñas.

Obviamente también había otro tipo de bebidas: agua mineral, refrescos, etc.

El pan nos lo dieron empaquetados individualmente:

Pan

En definitivas cuentas, nos ha parecido un buen sitio y prueba de ello es que hemos repetido varias veces. No me cabe duda de que si otra vez me da la hora de comer en sus cercanías volveré a ir.

Ya saben: Las Tinajas. Avenida del vino 69.

Teléfono:     926 311 697
Fax:     926 311 697
Teléfono móvil:     618 78 38 63

Correo: angel55tinajas@gmail.com

Su página web está aquí: Restaurante Tinajas Valdepeñas – Restaurante Tinajas – Valdepeñas

Atención

En todo momento fuimos atendidos con amabilidad y profesionalidad.

Nota sobre fotos

Las fotos que se han utilizado, han sido realizadas por Félix Ares y Álvaro Ares y las licenciamos como Creative Commons . Attribution 4.0. International CC by 4.0. Puede usarlas pero deben dar crédito a los autores y que se han sacado de la página https://felix.ares.fm

Creative Commons License

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Escapada a Baelo Claudia, ciudad romana en la ensenada de Bolonia, Tarifa, Cádiz

11 de septiembre de 2021

Muy cerca de Tarifa, en la ensenada de Bolonia, se encuentran los restos de la ciudad romana llamada Baelo Claudia, que data del siglo II a.C. y que se dedicaba principalmente a las salazones de pescados (principalmente atún) y la fabricación de la muy apreciada salsa de pescado que los romanos llamaban garum y nosotros, a veces, garo.

De esta ciudad ya habíamos hablado, de pasada en una entrada anterior de este mismo blog:

La ciudad romana de Baelo Claudia se construyó sobre una ciudad ya preexistente de origen fenicio y púnico. Primero se llamó Bailo o Baelokun y con los romanos pasó a llamarse Baelo, el emperador Claudio quien le dio la categoría de municipio y por eso adquirió su segundo nombre: Claudia.

Parte de la ciudad de Baelo Claudia. Observen que al fondo se ve África.

Su cercanía con África hizo que desde sus orígenes estuviera muy ligada con el comercio entre la península y aquel continente.

Todos los años, los atunes emigran desde el Atlántico al Mediterráneo (y regresan), y suelen pasar cerca de la costa de Cádiz, lo que se aprovechó desde épocas remotas para pescarlos mediante el procedimiento que se llama la almadraba. Pueden ver en detalle cómo funciona este método de pesca en el enlace que he puesto, pero digamos groso modo que se trata de ir conduciendo a los atunes, mediante redes, hasta un lugar concreto, donde se los captura.

Una vez capturados se procede a la salazón. Para ello en Baelo Claudia hay una gran factoría.

Tamaño de la ciudad

Para los estándares de la época se trataba de una ciudad bastante grande. Prueba de ello nos la da el anfiteatro con una capacidad para dos mil personas y las casa encontradas.

Detalle anfiteatro
Detalles del anfiteatro.

Otra muestra de que se trataba de una ciudad grande nos la da el hecho de que en ella había cuatro templos. Tres de ellos dedicados a la Tríada Capitolina (Júpiter, Juno y Minerva) y un cuarto dedicado a la diosa Isis.

El conjunto de templos en Baelo Claudia
Detalle de los emplos en Baelo Claudia

A la ciudad llegaba el agua procedente de cuatro acueductos. Uno de ellos se ha restaurado y puede verse muy bien:

Acueducto romano de Punta Paloma.

Las calles estaban muy bien enlosadas.

Losas de piedra en una calle de Baelo Claudia.

No todas las calles tenían estas grandes piedras. Otras, también estaban empedradas, pero con piedras más pequeñas.

El garum

A la entrada de la ciudad hay un museo donde se exponen algunas de las piezas encontradas, y se da información sobre la vida en la ciudad. Hay una sección dedicada al garum. El garum era una salsa de pescado que se fabricaba a partir de peces que se fermentaban en sus propias tripas. Las tripas son fundamentales pues en ellas hay ciertos encimas que disuelven y licuan los músculos. El usar peces con sus tripas ha producido un cierto error, pues algunos autores han creído que el garum se hacía con las tripas y desechos de los pescados y no es así. Se suele hacer con pescados pequeños, como las sardinas, siempre con sus tripas para utilizar las imprescindibles enzimas.

Se hace fermentar al Sol durante varias semanas, incluso meses, con lo que se obtiene una pasta, que después se cuela y se consigue un líquido de color parecido al vinagre de vino tinto y con un sabor que mi me gusta. Huele mal, pero su sabor es muy bueno.

Ese líquido se metía en ánforas, se sellaba y se enviaba a distintos puertos del Mediterráneo, principalmente a Roma donde era muy valorado.

Ánforas para el transporte del garum.

Recientemente en la universidad de Cádiz, han logrado reconstruir la salsa. Y hay una empresa que lo produce y vende, con el nombre de Flor de Garum. Todo el proceso utilizado y el resultado puede verse en el museo.

Con recipientes como este se ha reproducido, actualmente, el garum. Hay capas de peces, sal, peces, sal… y se deja fermentar.
Flor de Garum

A la izquierda hay una terrina de queso con garum.

Playa de Bolonia

Lindando con la parte sur de la ciudad se encuentra la Playa de Bolonia.

A la derecha de esta foto, hay una famosa duna.

A la derecha, la duna.
Decadencia de la ciudad

En el siglo II hubo un maremoto que destruyó gran parte de la ciudad. Posteriormente fueron atacados muchas veces por piratas, por lo que la ciudad entró en una decadencia de la que nunca se recuperó.

Nota sobre fotos

Las fotos que se han utilizado, han sido realizadas por Félix Ares y Álvaro Ares y las licenciamos como Creative Commons . Attribution 4.0. International CC by 4.0. Puede usarlas pero deben dar crédito a los autores y que se han sacado de la página https://felix.ares.fm

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