12 de julio de 2015
¿Se imaginan aceitunas confitadas? ¿A que no? ¿A que no nos imaginamos una aceituna dulce?
Recientemente he visto lo que IBM llama «Cocina Cognitiva». En ella el ordenador Watson, que fue el que ganó a los y humanos en el juego del Jeopardy. IBM ha creado una escuela de cocina en la que Watson ayuda a encontrar sabores que se lleven bien. Han hecho infinidad de recetas que son sorprendentes: burritos con chocolate austriaco, etc.
Watson leía cientos de recetas de cocinas en la red y veía qué es lo que usualmente combinaba con qué. Y descubrió una cosa que muchos ya sabían que para occidente los «maridajes» se dan entre cosas parecidas: salado con salado, etc. Pero la cocina asiática promueve los contrastes: dulce con amargo, ostras con ternera, etc.
A nosotros, occidentales, la idea de una aceitunas dulces nos parece muy extraña; pero a los asiáticos no.
En una tienda de productos asiáticos de Fuengirola he encontrado «aceitunas dulces». Las he comprado y las he probado.
Si las sacamos de la bolsa el resultado es este:
Lo que no he logrado saber es qué variedad de aceitunas es. Su hueso es un poco raro, tiene forma de huso.
EN CUANTO AL SABOR: Sorprende un poco, pero no tanto. Me recuerdo a los dátiles, pero sin empalagoso. Es decir, un sabor a datil pero menos dulce y con toquecito amargo. Me ha gustado.
la dirección del fabricante es: http://tongxifood.com/english/product.asp
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